Entendemos a la adolescencia como la etapa del desarrollo en que se comienza a construir la identidad, y es común vivirla con emociones variadas que van desde la alegría, la confusión hasta la ansiedad. Por ello es conveniente ofrecer espacios de orientación psicológica a las y los jóvenes para acompañarles en el análisis de sus elecciones, la identificación de sus sentimientos y manejo de sus emociones dentro de los campos sociales a los que pertenecen.